En un nuevo viernes de protestas de la denominada "Marcha del Retorno", cientos de palestinos resultaron heridos por la represión del Ejército israelí en la frontera de Gaza.
Al menos 240 palestinos resultaron heridos en Gaza este viernes, en una nueva jornada de protestas que fue reprimida por el Ejército israelí. La de esta semana es la vigésimo tercera protesta, que se repiten cada viernes en la frontera con Israel.
Según el ministro de Salud de palestina de los más de 200 heridos varias decenas recibieron impactos de bala, muchas fueron afectadas por gases lacrimógenos, y 38 fueron trasladadas a hospitales por disparos israelíes, incluidas una paramédica y un niño de 10 años, informó el Ministerio de Sanidad palestino.
La joven paramédica fue herida de gravedad por una bala que impactó en su pecho.
Ella es Shorouq Abu Msameh, joven paramédica palestina. Ahora mismo se debate entre la vida y la muerte por una bala disparada contra su pecho por francotiradores terroristas israelíes mientras atendía a otros heridos en la #GreatReturnMarch de #Gaza.#FreePalestine 🇸🇩 pic.twitter.com/1E0bUlofeC
— Esperanza (@pechosboys) 31 de agosto de 2018
Al igual que durante todas las represiones anteriores el Ejército de Israel emitió un comunicado justificando la brutalidad que se cobró la vida de más de 150 palestinos y dejó miles de heridos. La justificación es que los palestinos que participan de las protestas en la frontera son una amenaza para su seguridad. Sin embargo, son los soldados israelíes los que cuentan con cientos de francotiradores, gases lacrimógenos y armamento pesado que utilizan contra los manifestantes palestinos, que ni siquiera llegan a la valla.
🔴EN VIVO
Las protestas palestinas de la Gran Marcha de Retorno en la franja de Gaza https://t.co/1YFaeBCK02— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 31 de agosto de 2018
El odio contra los palestinos es alimentado desde el propio gobierno como el ministro de Defensa Avigdor Lieberman, que en repetidas oportunidades dijo que todos los habitantes de Gaza son terroristas y por lo tanto se justifica el uso de la fuerza, la represión y los asesinatos.
La tensión en la frontera entre Israel y Gaza ha sido alta en los últimos meses, desde que en marzo comenzaron las movilizaciones de las llamadas Marchas del Retorno.
Desde entonces, según el Ministerio de Sanidad, 160 palestinos han sido asesinados por el Ejército israelí cerca de la valla de separación.
La situación escaló desde fines del año pasado, cuando en un acto de absoluta provocación el presidente de Estados Unidos, Donald Trump anunció que trasladaría su embajada de la ciudad de Tel Aviv a Jerusalén, reconociendo en los hechos a esa ciudad como capital de Israel. El reconocimiento de Trump que coincide con las aspiraciones del gobierno israelí de que esa ciudad sea su capital "única e indivisible", choca con el resto del mundo que no la reconoce de esa manera y los los países árabes que reivindican también a Jerusalén como capital de un futuro hipotético estado palestino.
Esta provocación se suma a la agobiante situación que vive la población en Gaza, producto del bloqueo por tierra, aire y mar de parte de Israel, que ha convertido a la zona en una verdadera prisión a cielo abierto. Esta asfixia se agravó las últimas semanas al anunciar Estados Unidos que retiraría la ayuda económica a las organizaciones de ayuda humanitaria que actúan en Gaza.
Trump cut $200 million funding to Gaza as another weapon to break the will of Palestinian people, forcing them into the smallest of all corners in hope they'll accept a final peace deal that wholly favors Israel, & kills their aspirations.
Here's how Trump's cruelty hurts kids: pic.twitter.com/SGrzIbFebM
— CJ Werleman (@cjwerleman) 31 de agosto de 2018
Trump recortó en total 500 millones de dólares en distinto tipo de ayuda a los palestinos y dejó los fondos sujetos a una negociación con Israel. Se trata de un mecanismo perverso para asfixiar a los palestinos de Gaza como de la ocupada Cisjordania obligándolos a aceptar las condiciones ominosas a los que hace años los somete el Estado de Israel.